El ritmo cardiaco varía según la edad y la actividad que haga la persona. Al hacer deporte con asiduidad las pulsaciones en reposo bajan. Principalmente por dos motivos: el corazón se especializa mejor en bombear la sangre y, si el ejercicio se mantiene con el paso de los años, el corazón aumenta de tamaño, por lo tanto en cada latido envía más sangre. El pulsómetro nos sirve para conocer en tiempo real, nuestra frecuencia cardiaca, establecer las zonas de entrenamiento y dosificar mejor el esfuerzo. Para ello debemos dedicar un día a ir conociendo nuestros umbrales, para lo cual existen diferentes test.
- INTENSIDAD DE CALIENTAMIENTO O RECUPERACIÓN- Hasta un 65 % de F.C. max.
- INTENSIDAD MEDIA - Del 65 al 75% de F.C. max.
- INTENSIDAD ALTA - Del 75 al 85% de F.C. max.
- INTENSIDAD MAXIMA - Del 85 al 95% de F.C. max.
El uso regular de un monitor del ritmo cardíaco también ayuda a las personas que inician un programa de acondicionamiento físico a ejercitarse con seguridad. Y sin perder de vista que las pulsaciones del vecino son mejores que las nuestras. No. Solo existe un ritmo cardiaco bueno: el nuestro. Y que siempre será susceptible de mejora, pero exclusivamente comparado con nosotros mismos. Es decir, si mi frecuencia basal al inicio de un periodo de entrenamiento es de 60 pulsaciones/min, y tras un año de trabajo es de 52 pulsaciones/minutos habré ganado en salud.
Para principiantes, un monitor de ritmo cardíaco...
- ofrece una gran cantidad de información durante y después del ejercicio, e informa de cómo reacciona el cuerpo al mismo
- ayuda al usuario a adaptar el ejercicio a los objetivos que se haya propuesto, controlando la intensidad del ejercicio (a menudo los principiantes tienden a realizar el ejercicio a muy alta intensidad)
- informa sobre las mejoras de la condición física (por ejemplo, un ritmo cardíaco en reposo más bajo)
Para personas que realizan ejercicio con regularidad, un monitor de ritmo cardíaco...
- ayuda a controlar la intensidad del ejercicio o del programa de entrenamiento en diferentes circunstancias
- ayuda a adaptar el programa de entrenamiento a fin de lograr los mejores resultados
informa cómo reacciona el cuerpo al ejercicio y al descanso - ofrece información sobre el progreso (por ejemplo, un tiempo de recuperación menor para el ritmo cardíaco en reposo)
Para deportistas, tanto profesionales como amateurs, un monitor de ritmo cardíaco...
- ayuda a realizar diferentes sesiones de entrenamiento al nivel de intensidad planificado (lo suficientemente intenso en los días de gran rendimiento, lo suficientemente suave en los días de recuperación, la recuperación adecuada en entrenamiento de intervalos, etc.)
- Permite seguir un programa estricto de entrenamiento, considerando cada circunstancia y el nivel de condición física
- indica cómo reconocer las reacciones del cuerpo a la intensidad del ejercicio y al descanso, advirtiéndole con antelación de cualquier posible sobreentrenamiento, gripe, etc. (se deduce a partir de un ritmo cardíaco en reposo inusualmente elevado, una recuperación lenta, etc.)
Como ejemplo, uno muy llamativo entre dos grandes corredores que se enfrentaron en la Vuelta a España de 1991, me refiero a Miguel Indurain (acabó segundo) y Melchor Mauri (ganador de esa Vuelta). Dos especialistas contra el crono y con la motivación y la fuerza de ir a por todas. Indurain, es un corredor que alcanza y mantiene las 200 pulsaciones por minuto durante kilómetros(¡una pasada!), mientras que Melchor, su frecuencia cardiaca de máximo rendimiento estaba en las 170 pulsaciones. La mejor frecuencia: La de cada uno. No hay ni mejor, ni peor.
Con esta referencia y sin recordar el resultado de esa contra reloj, mas de uno habrá sacado sus conclusiones de quién ganó... Mauri batió a Miguel en esa última contrarreloj de esa Vuelta. Más no significa siempre, mejor. No todo está en tener una alta frecuencia cardiaca, sino tener buenas piernas y conocerte a ti mismo es una herramienta más efectiva para ganar (nuestros rangos de trabajo).
Los sprinteres, por naturaleza, alcanzan frecuencias muy altas disputando los últimos metros de las etapas, hablar de los 220 es algo alcanzable para ellos, pero tan solo lo pueden mantener unos pocos segundos. El motivo es muy sencillo, tienen fibras rápidas no solo en sus piernas, sino también en su corazón, que no deja de ser un músculo más en esos momentos al máximo esfuerzo. Por lo tanto, para ellos la tabla de referencia de arriba, tampoco vale. Conclusión, no hay que hacer estereotipos con los grandes deportistas, pues nos puede llevar a cometer errores en la preparación.
Un aspecto importante en el entrenamiento con pulsómetro está no solo en ver como tu cuerpo llega y mantiene un nivel alto de frecuencia cardiaca (es más un signo de capacidad física genética), sino más importante es ver, cómo entre serie y serie, en la fase de recuperar, tu corazón baja de pulsaciones. Este detalle te indica muchas veces tu estado de forma, porque cuanto más rápido bajes más en forma estás.
Y recordad... Don Benito tiene Schwinn, Saludos!!
En relación con esta entrada, deciros que en breve, realizaremos una nueva revisión de las pulsaciones de los alumnos de Schwinn. Aunque ya hemos podido constatar los beneficios obtenidos desde el inicio de la actividad, todavía no vamos a publicar ningún resultado, hasta que no tengamos los de todos los alumnos que asisten de forma asidua a la actividad. Eso sí, adelantaros que se han obtenido reducciones en algunos alumnos de entorno a las 6-10 pulsaciones/minutos. Su corazón late más despacio a igual intensidad de trabajo. Una mejora de salud innegable. Además, la pérdida de peso, y sobre todo de volumen en algun@s alumn@s, ha sido más que notable. Tenemos reducciones de volumen de hasta 5 cm antes del inicio de la actividad.
ResponderEliminarEn fin, felicitaros a todos por el trabajo que realizáis a diario en gimnasio y que como se puede comprobar repercute claramente en vuestra salud.
Seguid así!!!!