domingo, 25 de abril de 2010

De bicis, toboganes y tortillitas de camarones...

Hola queridos seguidores/as!!!!

Vaya ruta tan chula pudimos disfrutar el sábado por la mañana. Los protas: Sarita, Laure, Miguel, Alberto, Luis, y el menda. Lugar de la cita: la gasolinera de la salida hacia Escurial que hay en Miajadas. Sip, esta vez decidios que había que darnos un respiro de tanta cabra, tanto helipuerto y tanta redondilla... Hay que orearse de vez en cuando!!

La ruta, previamente planificada, consistía en ir por la vía de servicio de la A-5 desde la gasolinera anteriormente citada hasta Santa Cruz de la Sierra y vuelta por El Puerto de Santa Cruz (es decir por el otro lado de la autovía). Pues GPS en ristre, estos valientes pistoleros empezaron una ruta, que por las fechas en las que estabamos y por lo que nos habían dicho era espectacular. Y vaya que si lo era!!!!


Plano de la ruta

Detalle de la Ruta a la altura del Puerto de Santa Cruz


Perfil y datos técnicos

Punto de máxima pendiente (12% aprox.) llegando a Santa Cruz de la Sierra


Pues como a las 9:20 estabamos en la Gasolinera. Y primera sorpresa: Luis estaba allí!!! Jejeje, después de mil y un intentos fallidos, aparcamos y de un peugeot blanco, aparece nuestro amigo Luis!! Joer que sorpresa nos dío a todos, porque la verdad es que no le esperabamos (teníamos que haber hecho un porra... jejeje).

Al poquito, Miguel y Laure. Bajamos bicis, preparamos cadenas con grasa, vestimos a los ciclistas y ale, a machar almendrillas. La ruta se nos antojaba durilla, por la incesante sucesión de toboganes... pero señores qué toboganes!!!!

Justo donde está la salida a la A-5 dirección Madrid, sale un camino, de grava tipo asfalto triturado, con buen firme, aunque por su naturaleza hacía que se agarrara la bici que no veas... Como todo se a así.... Bien, pues durante al menos 10 km, el constante, fue ese, para arriba, para abajo, y uno, y otro, y otro... y cada vez más empinadas las subidas y más vertiginosos los descensos. Además, en las vaguadas, los badenes estaban llenos de agua y tuvimos los pies mojados desde el principio hasta el final.

A la altura de Villamesías, comenzamos la primera parte del periplo por carretera. Aquí, el camino llega a un punto en que se pierde, y tuvimos que subir por una veredita muy estrecha, que nos llevó a las afueras de Villamesías, y desde aquí salir a la carretera, y tomar de nuevo justo en el puente que atraviesa la A-5, de nuevo el camino. Hasta el momento, sin incidentes y a buen ritmo. Y siguen las subidas y las bajadas!!!! (pero esto va a ser así siempre????). Bien, pues ya pasando Villamesías el camino se suaviza ligeramente, y este caminos nos llevará hasta una dehesa, a la cual accedemos a través de una canadiense, porque el camino allí se corta. Entramos en la finca, y sin perder el camino, nos dirigimos dirección a la base de la sierra del Puerto de Santa Cruz.

El campo estaba espectacular. De verdad que ésta nuestra tierra, nunca me dejará de sorprender con los paisajes tan excepcionales que nos brinda en primavera!!! Pues tras esquivar varias vacas y terneros, que miraban con ojos ladinos a Laure (que no se dio cuenta, pero todas le miraban a él), llegamos a una cancela, que hay que abrir y acceder a un camino ppal.

Este camino nos llevaría al tramo más duro: es el ascenso que nos lleva hasta el cruce con Santa Cruz de la sierra. Es un constante ascenso, que tiene dos subidas que te deja las piernas y el corazón tiritando. La primera con una pendiente aproximada de 8-9%, y con grava suelta, comenzó por dejar el grupo estirado. En cuanto la vimos, el comentario fue "Otiaaaaaa...." y ya cuando nos metimos en faena, el "otiaaaaaaaa...." fue silenciado por el ruido que hacen las ruedas traseras de las bicis al patinar. Como derrapaban las ruedas traseras ... "rrrrrrrr"..."rrrrrr", ese era el sonido que teniamos. Ese y el de los 6 jadeando como perrillos en celo, porque la cuesta tenía su aquel... -Y ya hemos pasado la peazo de cuesta esa que se ve desde la autovía???- se comentó... pues no se. No estoy seguro... si era la que habiamos subido o aún la teniamos pendiente.... Una paradita para esperar a Luis, que se nos había quedad un poquito atrás y ale seguimos.

Nos ponemos de nuevo en marcha, y ya estabamos a la altura del Puerto de Santa Cruz, es decir, no quedaba mucho para el cruce de la autovía. Pues bien, tras un par cuestas suaves, apareció la temida... Joeeerrrrrr, que aspecto da cuando te vas acercando a ella!!!!! Comienza con una ligera curva a la izquierda y para arriba. Menos mal que el firme estaba mejor que el anterior, porque si encima le tienes que sumar grava suelta, más de uno echa pie a tierra. Pero no... ahí, como valientes, y con más esfuerzo que menos, los seis logramos coronarla!!!! Nuestro primer 12%. Por ahora, creo que es la pendiente más fuerte que hemos ascendido... y la verdad que fue una satisfaccióne enorme!!!!!

Una vez en el cruce en Santa Cruz de la Sierra, sesión de fotos para inmortalizar!!!


Aquí los seis jinetes, con el "general" en formación... jejejej

De como con dos "cosillas" puedes improvisar un tripode para la cámara

Espectacular vista de los alrededores de Santa Cruz de la Sierra

Pues tras la sesión fotográfica, vamonos que hay que cruzar y tendremos que hacer la paradiña para reponernos. Hacia dónde, pues hacia la gasolinera. Nada para allá quen os vamos, y como tenía la ruta en el GPS, me di cuenta que no hacía falta llegar a la gasolinera, sino que tras cruzar la autovía, por debajo, en la siguiente rotonda, sale un camino asfaltado. Cuando yo había girado, empecé a oir gritos de protesta. Otia, la plebe se me ha revelado. "Dónde vaaaassss??? Qué es para la gasolinera!!!!! Ya estás como siempre!!!!!"... después de tres lindezas más, yo seguí, con lo mío seguro de mi mismo, hasta que .. ohoh... pero si parece que termina el camino en aquella cancilla... veraaassss la que me va a caer. Uffff, un efecto óptico. Ibamos ok hacia el Puerto de Santa Cruz. Y es ahí donde hicimos el avituallamiento:


Entrada a El Puerto de Santa Cruz

Vistas desde la zona de descanso. Bonitas, verdad?

Pues tras un rato de descanso y risas, chascarrillos y estiramientos, decidimos continuar. Salimos del pueblo y tras, seguir dirección a la autovía, y que tuvimos que dar la vuelta, por lo de siempre. El menda agachas la orejas y ale todo para delante, hasta que los gritos de esta gente y un peazo de cartel que pone "AUTOVÍA", me indicó que no... que por ahí no era...

Tomamos el camino correcto, y de nuevo un incesante sube-baja, pero esta vez más suave que en el otro lado, y por unas zonas realmente bonitas.

Ya a las alturas que estábamos, comenzamos a pensar en que pronto debíamos encontrar la zona donde el camino desaparecía. Efectivamente. Llegamos a un punto en que el camino se cortaba, pero nos dejaba un sendero bien parcado por las rodadas de tractores y coches. Pues por ahí. A mitad de camino, parada para saltar una valla improvisada. Y continuamos (esperemos que no haya ovejas, perro o pastor...). Y aquí nuestra tierra nos regaló la estampa más bonita de todo el día. Teníamos que cruzar un río, por un pequeño puente improvisado:


Esto es Extremadura. Nuestra tierra. Para sentirse orgulloso, verdad?

Después de cruzarlo, y siguiendo un sendero dejado por las ovejas y hacer un poco como ellas, llegamos a prado encharcado, que cruzamos y nos calento las piernas de lo lindo, hasta dar con una alambrada, que saltamos y nos devolvío a la vía de servicio. Esta fue la parte más bonita de todas y que disfrutmaos como niños.

Desde aquí y hasta Miajadas, todo fue un incesante sube-baja, y uno, y otro y otro... madre mía. A esas alturas, las piernas ya empezaban a chillar!!!!

En la última cuesta, Alberto iba adelantado, Laure y Miguel, iban un poco retrasados, así que me decidí a atacar... Demarraje fuerte, adelante a Alberto... vi como éste comenzó a darle caña, pero casi al final, me quedé sin piernas, y el jodio me ganó la partida... por esta vez pase. Pero la próxima es mía, Alberto !!!! ;-)

Ya en el area de la gasolinera, bicis al coche, cepillado solidario que hizo Sara a todos aquellos que teníamos que subir al coche, y vamos que nos queda la ultima etapa: Los Barros. Aquí, en una mediodía digna de un general, con la terraza en perfecto estado, los mendas se "jincaron" varios "yellowbull", que iban apetenciendo más cuantos más tomabas. Y como además había fiesta, los fiesteros, dejaron "olvidados" algo de avituallamiento que unos sufridos y desangelados ciclistas no dudaron en dar cuenta de ellos. Esas tortillitas de camarones!!!!! Y esa ventresca con pimientos!!! De todos modos, como somos unos caballeros, decidimos invitar a las señoritas del fondo... que se sumaron al "avituallamiento especial".

Qué tiene en la mano el Migué????

Tras varias tortillintas y jarritas, cara de plena satisfacción der Migué

Nuestras vecinas de avituallamiento


Pues esta es la crónica de nuestro día. Un día de bicicletas, un día de toboganes, de constantes cuestas arriba y abajo que no daban tregua a las piernas, y un día en que las tortillitas de camarones se convirtieron en las auténticas protagonistas del avituallamiento de este grupo de btteros que cada día lo pasan mejor y disfrutan más.

Saludos a tod@s!!!!!




http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=864919

1 comentario:

  1. Si señor, yo no lo hubiera expresado mejor......Me parto con lo de las vacas y Laure jajajajajajajaj ay que me da algo!!!!!

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