lunes, 18 de abril de 2011

Nuestro alumno Alberto (Tito) subio el L'Angliru... juerrrrrrr

Con permiso de Alberto (Tito) he incluido en el blog (que os recuerdo que es de todos vosotros) la hazaña que ha llevado a acabo en tierras asturianas. Ha subido el L'Angliru. Para quien no lo conozca puede ser el puerto de montaña más duro que existe, junto con el Mortirolo en Italia. Ni Alpe'huez, ni ostias. Esto si que es un puerto de montaña. Os recomiendo leer la crónica y deleitaros con las fotos. Y de paso, meteros en sus zapatillas y disfrutad del sufrimiento que tuvo que padecer y de la satisfacción que debió sentir al coronar un puerto como éste. Os dejo con la narrativa de nuestro alumno de Schwinn en nuestro gimnasio, al que recuperamos para satisfacción de todos nosotros, y especialmente de Sara y mía. Es muy grato tener entre nosotros a personas como Alberto. ¡¡¡¡¡Vamos a subir al L'Angliru con él!!!!!


EL CIELO HECHO INFIERNO

Qué decir de semejante coloso, del "olimpo del ciclismo" como reza en el cartel de bienvenida al entrar en Riosa, concejo donde se sitúa La Vega, pueblo desde el que comienza a serpentear esta amalgama de alquitrán en busca del sueño de todo ciclista, coronarle,  hacerlo tuyo, tocar el cielo.
Era temprano, las 9 de la mañana, 8 grados y niebla, así fue como enfilé el sendero hacia la locura. Una bella y mística locura. Al girar de camino hacia el área recreativa de Viápara ya intuyes que vas a por algo grande, que tienes que estar muy concentrado y que verdaderamente este deporte tiene mucho de cabeza, me conciencié que iba a estar dando pedales durante casi dos horas picando hacia arriba y nada más...

Comenzaba la odisea, si bien es cierto que los primeros 6km hasta llegar a Viápara son lo más "flojos", con rampas que no superan el 9%, son km y pican las piernas igualmente. De ahí hasta el final "el infierno".
Antes de seguir comentaré que subí con una mtb, su lado bueno los desarrollos que puedes meter, lo malo que es una bici que pesa mucho para este tipo de puerto, además las ruedas no eran lisas, por lo que el agarre se hace casi imposible en ciertas rampas, aconsejo montar unas lisas para este tipo de puertos, es más importante de lo que parece.



El trazado soberbio, con unas vistas impresionantes, esta es la primera herradura en condiciones se vira a derecha a casi un 10%

 
    
Subiendo a ritmo, intentando conservar fuerzas en las partes menos exigentes


 

 Más y más curvas, el paisaje va cambiando y el cuerpo cada vez está más a tono




¡VAMOOOOOOOOSSSSS! Aunque sé que no era para mí, sino para el gran Contador
...iba tan metido en el papel que fue como una inyección de adrenalina.......


 

Más y más pueblos y bellas vistas
 

Estas ya son las últimas rampas en las que se puede ir respirando con tranquilidad,
aunque a lo tonto y a lo modorro te has metido 6 km entre pecho y espalda subiendo y eso
luego pasa factura.
 
 
Encontrarme este titular del Marca, incrustado en pleno Angliru  me hizo apretar 
un poco más los dientes, ya venía un poco tocado y resulta que ahora es cuando
empezaba "el infierno"

Como bienvenida al infierno, una rampa del 22%, seguida de otra del 16% con
mínimas del 13% y así 5 km. Obviamente aquí no hay muchas fotos...mis manos 
se retorcían en el manillar, dándole a los riñones que daba gusto.

                        Aquí realizé mi primera parada de la ascensión, me quedaban 2,5km infernales
                    y me molestaban hasta las pestañas, coloqué el casco trago de agua y para arriba,
                   en este puerto no te puedes parar, te caes literalmente para atrás con la bici, os aseguro
                  que es mejor ir montado en ella...aunque resulte paradójico.
                  ¡Fijaos en la pendiente!
   

                                           ¡QUE VIENEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!
                                                                LA PARED

La famosa Le Cuñe les Cabres, al loro con la pendiente, después de Cobayos,
nos metemos en la creme de la creme, una pared que parece un problema matemático,
¡qué barbaro!, como se pegaba el alquitrán a las ruedas, parecía que se me venía
el mismísimo cielo encima. Apreté los dientes, el culo, las uñas y hasta mi último
poro y para arriba como un león....


¡Cielo santo!, segunda y última parada y tan sólo había hecho 400 ó 500 metros. Me encontré
un lugareño que accedió a inmortalizar semejante estampa, me animó a seguir, auque me dijo que 
aún quedaba lo más duro....trago de agua y hasta luego gracias.




Tocando el cielo........


                                            SUFRIENDO, PERO DISFRUTANDO AL MÁXIMO



Esta es la sorpresa del puerto, cuando ya sales reventado de 2 km al 20,21, 19, 18
y 23%. De repente te encuentras el postre, El Aviru, una rampa del 20% que ya 
sí que te deja fino filipino (en homenaje al gran Juanillo Monstruo), me costó lo suyo
dar cuenta de ella, pero lo hice no sin dar más eses que una peonza.


 

¡POR FIN! Os diría que entré esprintando, pero os mentiría, simplemente me 
hubiera gustado hacerlo. 
Ahí estaba, majestuoso, me sentía parte de la montaña, ¡qué sensación!. Tan sólo 
había una explanada y dos mujeres en la cima, que fueron las que me hicieron 
semejante retrato y las que escucharon un atronador ¡TOOOOOOMMMMMAA! a mi
llegada a la cumbre, me miraron con sorpresa pero como comprendereis me daba todo igual.

No busqueis fotos del descenso, bastante tuve con hacerlo, es peligrosísimo y más con mtb. Además 
uno ya va con los brazos hechos trizas y hay partes sin quitamiedos, subidón, subidón!!!!!!


"Dedicado a todos aquellos que me quieren y respetan este deporte, que seguramente sean los mismos que 
hayan esbozado más de una sonrisa leyendo esta humilde reflexión".

Alberto Blanco Pacheco (Tito)


2 comentarios:

  1. Alberto, como te he dicho antes, me quito el sombrero CAMPEON, ihhhhh madre quien pudiera!!!!!

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  2. Impresionante relato y unas fotos espectaculares, enhorabuena Alberto. No puedo ni imaginarme como tiene que matar ese 23%, y despues de lo que llevas encima. Yo habria tirado la bici por el barranco y hubiese llamado a un taxi, jeje.

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