Las Antenas de Montánchez

Ayer, por fin, salimos fuera de Don Benito... (ya nos vale!!!). Jartitos de subir al helipuerto, la cabra, el helipuerto y la cabra, y suma y sigue, decidimos que ya era hora de tomar aire fresco por ahí fuera. Y la elección: Subir a Montanchez por La Quebrada y subir a las antenas

Pues nose... lo mismo una de estas en el patio pal canal plus... cabrá en la mochila??

Vamos con la ruta!!


Después de dar varias vueltas por la wikiloc, encontré esta ruta, que a pesar de ser por asfalto en casi su totalidad, me pareció interesante tanto por la subida a Montanchez, como por los dos lugares que visita: las antenas y el bosque de castaños.

La ruta parte de Almoharín, donde dejamos el coche, y comenzamos a pedalear. La mañana estaba más fresca de lo que nos hubiera gustado, pero mejor... porque con la que venía encima, casi que mejor.

Detalle de la ruta

La ruta es circular, y salen unos 49 km, de los cuales más de la mitad son subir, y sobre todo los primeros 21 km que son subir, y subir y subir... hasta decir basta. Y cuando dices basta... aparecen la subidita a las antenas... De media, unos 18 km/h, esto para los fans de las estadísticas.

La ruta y el perfil

Las primeras pedaladas son para localizar el cruce de Arroyomolinos, por el cual giramos a la izquierda, y tomamos dicha carretera comarcal, muy bien de firme y sin apenas tráfico. Son 5 km hasta llegar al cruce para Montánchez. En esos 5 km tienes que calentar bien... y aunque hay repechos, son un aperitivillo comparado con la que se nos viene encima...

Giramos en el cruce a la derecha y empezamos a subir, y a subir, y a subir... Laure y Sara delante, y yo, un poco más atrás, que es mucha la cuesta que queda y quiero llevar controladas las pulsaciones! Pongo una cadencia constante, y manteniendo las pulsaciones a raya, logro tener un ritmo que si bien, de lleva algo despegado de Laure y Sara, me permite seguirlos sin grandes problemas.

Van cayendo los kms de subida... y al poco aparece un chaval con la bici de carrera que nos pasa como alma que lleva el diablo... y nosotros ahí, haciendo lo que podiamos con las burras... Y como os dije, gracias a que el día hace fresco! Si hace calor, a alguno nos da un penterre.

Las curvas se suceden y al adelantar a un perico a caballo llegamos a un cerrete donde por fin vimos Montanchez!!! Joer, que alegría, un descansito!!! Y claro foto para inmortalizar el evento!

Atentos que van a sacar la falta!!!!!! Que no es un partido de futbol!

Pero qué coño andarán haciendo éstos por aquí!?!?!

Los Kñas y el Kastillo de Montanchez de fondo!! Jaarrr

Después de orientarnos por donde andábamos y hacia dónde teníamos que ir, y consultar con el GPS, ale, vamos pal pueblo, que la primera es la de las antenas. Porque aún nos quedaba lo más duro. Recordad, que llevamos subiendo alrededor de 15 km y aún nos quedan otros 5-6 km con las pendientes más chungas.

Un detallito de la puñetera subida a las antenas

Una vez orientados nos ponemos en marcha por una pista cementada... jaaarrrr... pero cuánto queda pa la cima?!?! Porque como todo sea así... tela tela... Y sip, todo era así, no mejor dicho, era peor. Peazo de rampas... así nos miró una señora con batín azul... "ande irán estos tres modorros..." pensaría la buena señora. Puuues, pa las antenas vamos!!! La pista cementada, y siguiendo el track que nos descargamos, nos llevó a una portera con una canadiense donde nos esperaba lo peor... una pista asfaltada algo rota, con firme regular y que cada curva y que cada cambio de rasante daba a una rampa aún peor... pero es que este calvario no se termina nunca???? Y las antenas ahí, mu cerquita, pero mu lejos, y nada... que no se arriman ni queriendo. Pero poco a poco, y metro a metro, la cuesta nos llevó a las antenas. Coña, coña!!!! 21 km subiendo!!! Y un final que te pone en tu sitio, por si tenías alguna duda de tus capacidades y tus fuerzas.

Desde la canadiense y hasta las antenas... eso parece no terminar nunca!

Y la recompensa, tanto la satisfacción de haber culminado y las peazo de vistas que ofrece ese punto de la sierra. Donde por cierto, además de un montón de antenas, hay un punto geodésico. Algunas foticos para inmortalizar que llegamos allí arriba...

En lo alto de las antenas... unas vistas fantásticas!!!

Ein?!?! Qué será lo que ha dejado a Laure boquiabierto?!?!?

Aunque no se aprecia, allí al fondo, en todo lo alto, el rada de la Zarza

Pues como hacía fresquete y aire, decidimos bajar para buscar el siguiente punto de exploración: el bosque de castaños. Puesto que la pendiente era fuerte, bajamos con cierta precaución, y sobre todo porque deslomarnos sobre el cemento rugoso, no era lo que más nos apetecía. Poco a poco, fuimos restando metros, hasta llegar al punto de partida en el pueblo. Desde allí, y con el GPS, llegamos a la entrada de la ruta de los castaños. Está marcada con unas tablillas en rojo (hay otra ruta en azul, pero no vimos cuál era).

Es una ruta realmente bonita y que merece la pena hacerla. Y en octubre, cuando las castañas están maduras, eso tiene que ser una pasada, porque es ahora, que está todo seco y que los castaños están echando sus hojas, es una auténtica maravilla... pues imaginaros.

Al principio del camino, que comienza con un empedrado cuesta arriba basante importante, nos encontramos con estos simpáticos guarretes, que nos llamaron la atención... E imaginamos una buena ración de jamón ibérico de bellota con una cervecita... uhmmmm... joe que aún no habiamos comido nada. Bueno, cuando terminemos esta miniruta ya comeremos algo en el pueblo.

La fauna autóctona... guapos eh????

Después de varias subidas con piedras y raices vistas, llegamos a una zona de callejas estrechas, chulisima, que nos lleva a una sendero entre los castaños, que parecen los senderillos que se muestran en los videos que hacen los alemanes en los bosques... Lo dicho en otoño-invierno esto tiene que ser una pasada!!!

Por El Castañar... que pena que sea tan cortita la vuelta

Ya os digo, la ruta es corta, y una pena que termine tan rápido, pero merece y mucho la pena. Y como ya era tarde, decidimos en vez de subir al castillo, salir del pueblo. Justo antes de salir, nos tomamos el avituallamiento en la salida hacia el cruce de Alcuescar, en un crucero.

Firrrrrrmés!!! Ar!!! que nos van a dar el rancho!

Chata, arrimate que no digan que no estuvimos por aquí!!!

Las vistas que dejamos atrás en Montanchez... volveremos, lo prometemos!!!

Tras comer algo, salimos de Montanchez. La bajada es trepidante, muy intensa y de buena pendiente, hasta llegar al cruce. Luego giramos a la izquierda dirección Alcuescar. Seguimos bajando, y bajando, y el cuentakms echando chispas... 61 km/h vi en un momento que quite la vista de la carretera y sin dar pedales... Otia si damos con nuestros huesos en el suelo, lo que quede de nosotros cabe en una bolsa de pipas... poco más, jejeje. Pues como no ocurrió nada, llegamos al cruce de Arroyomolinos. Aquí el terreno se hace prácticamente plano, así que decidimos darle kña a las bicis... A una media de unos 28-30 km/h conenzamos a llanear. Nos ibamos relevando, hasta que al salir de Arroyomolinos nos comenzó a arreciar un fuerte aire de cara, peeero, decidimos no era el momento de aflojar el ritmo, así que la paliza que nos dimos hasta llegar a Almoharín fue importante. Ufff... qué alivio cuando por fin dejamos las bicis!!

Un día memorable para los kñas!! Además de lo bien que nos lo pasamos Laure, Sara y yo, y superar los retos que esta ruta nos había planteado, nos ha dado a los tres un balón de oxígeno que necesitabamos, un poco cansados de hacer las mismas rutas una y otra vez... Y lo principal, que compartir estas experiencias con los amigos, es lo mejor para un día de vacaciones!!!

Nos vemos por esos caminos!!!